Brett Cohen no es una estrella de cine o un cantante pop, el es solo un bromista que, toda su vida, se preguntó ¿cómo sería ser famoso?.
Cohen, de 21 años y su amigo Edward Sturm de 23 años, pergeñaron el plan hace unos tres meses. La idea era: Apuesto a que si camino rodeado de guardaespaldas y fotógrafos, la gente se vuelve loca.
Para comprobarlo, contrataron guardaespaldas, un equipo de camarógrafos y fotógrafos falsos que lo siguieran a todas partes.
Los miembros de su equipo crearon un "boca a boca" diciendo a la gente que una gran estrella estaba a punto de salir del Rockefeller Center.
Y esto es lo que sucedió:
En una entrevista: "¿De dónde lo conoces?: ¿Él era Spiderman?", un hombre que cree que Cohen es un cantante dice: "Yo escuché su primer single, es muy bueno". "No sé el nombre, pero yo lo escuché en la radio".Una chica: "Me saqué una foto con él, me siento especial". Otra chica adolescente gritó: "Yo lo amo! Más tarde, otro engañado afirma: "Yo creo que es excelente, es absolutamente impresionante, tiene un gran futuro en la industria del cine".

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