El arquero Khalid Askri del club FAR Rabat no aprendió que antes de celebrar tiene que asegurar el balón, pero la emoción le ganó en esta oportunidad en los octavos de final de la eliminatoria de Marruecos.
Su equipo enfrentaba al Mahgreb Fez. y se fueron hasta la definición desde los doce pasos, el portero se concentró y logró rechazar el balón, se levantó rápidamente para golpearse el pecho con su hinchada, como diciendó que él fue más mientras el balón se fue introduciendo dentro del arco por el efecto que tomó.
Con este error, deja pasar la oportunidad de ser cuatro veces campeón de manera consecutiva, pues fueron campeones en 2007, 2008 y 2009.